Para determinar si tu vivienda cuenta con una cámara de aire, es fundamental realizar una inspección visual detallada. Observa las paredes y techos en busca de posibles brechas o separaciones entre las capas de material. Si puedes identificar un espacio vacío entre dos superficies, es probable que haya una cámara de aire presente en tu hogar. ¡Nuestra guía te va a a ayudar a saber si tiene o no cámara de aire tu vivienda!
En la construcción de una vivienda, es fundamental considerar diversos elementos que garanticen su durabilidad, eficiencia energética y confort para quienes la habitan. Uno de estos elementos es la cámara de aire, una característica que puede tener un impacto significativo en el aislamiento térmico y acústico de una propiedad.
En este artículo, vamos a ver qué es una cámara de aire, cómo identificar si tu vivienda cuenta con una y cuáles son sus beneficios. ¡Sigue leyendo!
¿Qué es una Cámara de Aire?
Una cámara de aire es un espacio vacío o hueco que se encuentra entre dos capas de material, como paredes o techos.
Esta separación proporciona un aislamiento adicional, ya que el aire atrapado actúa como un aislante térmico y acústico, ayudando a regular la temperatura interior y reducir el ruido exterior.
Entonces, veamos los trucos para saber si nuestra vivienda tiene cámara de aire
A la hora de considerar el aislamiento térmico en una vivienda, es esencial determinar si la misma cuenta con una cámara de aire donde se pueda inyectar o insuflar el aislante deseado. Para ello, es importante conocer algunos métodos que nos permitan identificar la presencia de esta característica fundamental en nuestras casas. A continuación, presentamos diversas formas de detectar si una vivienda tiene cámara de aire:
Tipo de Ladrillo Exterior
Observar el tipo de ladrillo utilizado en la fachada puede ofrecer indicios sobre la existencia de una cámara de aire. En general, los siguientes tipos de ladrillo suelen indicar la presencia de una cámara de aire:
- Fachadas con ladrillo visto (cara vista).
- Fachadas enfoscadas con un ancho de muro superior a 30 cm.
- Fachadas de prefabricado de hormigón.
Año de Construcción
El año de construcción de la vivienda también puede proporcionar pistas sobre la presencia de una cámara de aire:
- Viviendas construidas antes del año 1969: Estas viviendas suelen contar con una cámara de aire sin aislamiento térmico en su interior.
- Viviendas construidas entre 1969 (RT 69) y 2006 (CTE): Aunque la normativa exige aislamiento térmico en la cámara de aire, muchas viviendas de esta época tienen un aislamiento con espesores mínimos. Sin embargo, estas cámaras de aire aún pueden ser susceptibles de ser inyectadas o insufladas con aislamiento térmico.
- Viviendas construidas desde 2006 hasta la actualidad: Estas viviendas suelen tener cámaras de aire debido a soluciones de fachada interior innovadoras, como la tabiquería de yeso laminado, que permiten el aislamiento en la cámara de aire disponible en la perfilería. También pueden cumplir con los requisitos mínimos de aislamiento, lo que permite aislar la cámara de aire disponible.
Trucos para Detectar una Cámara de Aire
Además de los métodos anteriores, existen algunos trucos que pueden ayudarte a determinar si tu vivienda tiene una cámara de aire:
- Prueba del Sonido Hueco: Da golpes en las paredes y escucha el sonido. Si el sonido es hueco, es probable que haya una cámara de aire.
- Verificación de Salida de Aire: Observa si sale aire a través de puntos específicos en la fachada, como enchufes, interruptores, pasa cintas de persianas, rodapiés o ventanas. La presencia de corrientes de aire puede indicar la existencia de una cámara de aire.
Con estos consejos, podrás determinar si tu vivienda cuenta con una cámara de aire, lo que te permitirá tomar decisiones informadas sobre el aislamiento térmico de tu hogar.
¿Sabías que puedes fortalecer el aislamiento térmico insuflando las cámaras de aire? ¿En qué consiste?
Insuflar las cámaras de aire es un método efectivo para reforzar el aislamiento térmico de una vivienda. Consiste en introducir un material aislante en la cámara de aire existente, llenando el espacio vacío y mejorando así las propiedades térmicas de la estructura. Este proceso se realiza mediante equipos especializados que inyectan el aislante en la cámara de aire a través de orificios estratégicamente ubicados en la pared o el techo.
Los materiales aislantes térmicos más comúnmente utilizados para este fin son la celulosa, la lana de roca, la lana mineral y EPS (poliustireno expandido) que pueden ser utilizados dependiendo de las necesidades específicas de cada proyecto.
Insuflar las cámaras de aire ofrece varias ventajas, entre las que se incluyen:
- Mejora del aislamiento térmico: Al llenar la cámara de aire con un material aislante, se reduce significativamente la transferencia de calor a través de las paredes o techos, lo que ayuda a mantener una temperatura interior más estable y confortable durante todo el año.
- Reducción de costos energéticos: Un mejor aislamiento térmico significa que se requiere menos energía para climatizar la vivienda, lo que se traduce en un menor consumo de combustible o electricidad y, por lo tanto, en facturas de energía más bajas.
- Mayor confort: Al evitar las fluctuaciones extremas de temperatura, el aislamiento térmico insuflado crea un ambiente interior más confortable y acogedor para los ocupantes de la vivienda, independientemente de las condiciones climáticas exteriores.
- Reducción de la huella de carbono: Al reducir el consumo de energía, el aislamiento térmico insuflado contribuye a la disminución de las emisiones de gases de efecto invernadero y, por lo tanto, ayuda a mitigar el cambio climático.